Casos de escabiosis aumentan en zonas de Maracaibo por falta de agua potable

 

El Barrio Etnia Guajira, ubicado en la zona limítrofe del Municipio Maracaibo, parroquia Venancio Pulgar, no tiene servicios domiciliarios desde que las primeras familias se asentaron ahí desde hace más de 23 años.

 

200 niños de la comunidad  han sido diagnosticados con escabiosis.

 

En el barrio no cuentan con agua potable, no tienen gas y recurren a las bombonas de gas y a la leña para cocinar sus alimentos. Estos problemas se traducen en el aumento de las afecciones de la piel en la comunidad. En el Centro de Promoción Integral del Niño (CEPIN), de los 365 niños que son atendidos, 200 han sido diagnosticados con escabiosis.

 De acuerdo a Elsa Carmen Montiel, coordinadora del CEPIN, tres niños de tres meses han faltado al centro debido a esta situación. “No son solamente los niños quienes están siendo afectados por la escabiosis, también están sus familias. Si el niño recibe tratamiento, igual correrá el riesgo de contagiarse nuevamente en su casa”, manifiesta Montiel.

 

Sin acceso al agua potable, el tratamiento para frenar el contagio de escabiosis en la comunidad no vislumbra una solución al corto plazo. “No tenemos agua potable, bebemos y cocinamos con el agua cruda. Las familias tampoco tienen filtros, el único lugar donde se filtra el agua es el Cepin, pero el resto de la comunidad no lo tiene”, expresa Carmen Montiel.
Las tomas de agua a las cuales tiene acceso la comunidad provienen de mangueras conectadas al embalse de Tulé, instaladas en la última gestión de Manuel Rosales, como gobernador del estado Zulia. Desde entonces, la comunidad no ha recibido la atención de los organismos estatales para mejorar sus condiciones de vida.
La escasez de medicamentos e insumos para el tratamiento de la escabiosis, así como el aumento de los precios, complican la situación de las familias para tratarse. A la escabiosis, se suma un brote de rubéola entre los niños que asisten al Cepin. Los habitantes de la comunidad están en riesgo constante de contraer enfermedades.
Comunidades como el barrio Etnia Guajira, que no cuentan con planificación urbana, deben ser atendidas con urgencia debido a que representan un problema de salud pública y sus habitantes se encuentran en estado de vulnerabilidad.

 

Iniciativas para el desarrollo sustentable

 

A pesar de las carencias que presenta el barrio Etnia Guajira, la comunidad desarrolla iniciativas orientadas a lograr el bienestar familiar y el desarrollo sustentable. La fundación Isabel Martín, en conjunto con Jeannette Makenga y Carmen Montiel, coordinadoras del Cepin, promueven un programa de huertos comunitarios en diez parcelas del barrio.

 

 

Los huertos comunitarios en su primera fase comprenden siembras de cebollín, espinaca, cilantro, berenjena, pimentón y plátano. Se tiene previsto una producción de 4 a 5 kilos de verduras y hortalizas por parcela, para consumo de la comunidad y el centro de atención. En la segunda fase, prevén cosechas de tomate y cebolla.

 

 

 

Prensa Codhez

Casos de escabiosis aumentan en zonas de Maracaibo por falta de agua potable

Entradas Relacionadas