Deficiencias de servicios públicos, brechas digitales y deserción escolar ensombrecen el panorama de la educación en el Zulia

Las fallas de servicios públicos, la deserción escolar, el aumento de brechas digitales y los bajos salarios de maestros y profesores son algunas de las realidades que dificultan el acceso a la educación en la región zuliana. La Comisión para los Derechos Humanos del estado Zulia (Codhez) publicó el Boletín de septiembre 2020 sobre la situación general de los derechos humanos en el Zulia, que se centra en la documentación de la situación del derecho a la educación y los derechos ambientales.

En el boletín se reporta que, a inicios de 2020, se registraron altas tasas de ausentismo estudiantil que promediaban 70%, además de otras denuncias relativas a la infraestructura y mantenimiento de las escuelas públicas. Con la llegada de la pandemia y la vigencia de la cuarentena social y colectiva, las actividades académicas presenciales fueron suspendidas en todos sus niveles, con la implementación de un sistema de educación a distancia que no cuenta con la preparación e infraestructura para ser aplicado eficazmente en los municipios de la región.

Educación desmantelada

A inicios de 2020 se denunció que las escuelas públicas en el Zulia estaban en ruinas, y se contabilizaba 70% de ausentismo estudiantil. Las razones básicas de ese ausentismo responden al mal funcionamiento de los servicios básicos, escasez de dinero en efectivo para cubrir costos del transporte público, y la falta de alimentos tanto en los hogares como en las escuelas.

También, se reportó una tasa de deserción de hasta 55% de maestros y profesores en la región. Es decir, de casi 35.000 docentes, solo 18.000 se incorporaron a sus puestos de trabajo para enero de 2020. Algunos maestros han tenido que renunciar para dedicarse a otras labores debido a los bajos salarios.

Otra de las realidades que se apuntan en el boletín de septiembre de Codhez es la situación de la educación diversificada. La mayoría de los bachilleres recién graduados no ingresan a la educación superior. La crisis económica los obliga a dedicarse a trabajar. Según datos del Sindicato Unitario de Magisterio del Estado Zulia (Suma), de 15.000 bachilleres egresados en el período 2018-2019, apenas 10% habría proseguido sus estudios en la educación superior.

Con respecto a las instituciones de educación superior, estas se encuentran en una situación muy precaria. La Universidad del Zulia, principal casa de estudio de la región, ha sido víctima del desmantelamiento de sus instalaciones e infraestructura, incluyendo cableados eléctricos, equipos de aire acondicionado, materiales de oficina, entre otros bienes, que han sido robados en reiteradas ocasiones, sin que hasta los momentos se hayan determinado responsabilidades. Desde mediados de marzo hasta el 31 de julio se registraron 39 incidentes de inseguridad en la Universidad del Zulia, siendo la más afectada a nivel nacional.

Contexto de la pandemia por Covid-19

Con la vigencia de la cuarentena social y colectiva, a partir del día 13 de marzo el gobierno nacional decidió la suspensión de todas las actividades académicas presenciales en todos sus niveles, y la implementación de educación a distancia para la culminación del año escolar.

Según el ministro de educación el mecanismo de evaluación consistiría en un portafolio en el cual los padres debían archivar todas las actividades que los docentes asignaran, bajo el marco de un Plan Pedagógico de Prevención y Protección denominado Cada Familia, Una Escuela mediante el uso de internet.

 Según el Observatorio Venezolano de los Servicios Públicos, el 53% de los hogares venezolanos no tienen acceso a internet, estimándose, entonces, que el acceso de los estudiantes a los contenidos educativos por medio de internet es sumamente bajo. Ello fue reafirmado por Nicolás Maduro cuando dijo en abril que “El 44% de los estudiantes tiene acceso a los contenidos educativos por internet”. Es decir, más del 50% de la población estudiantil nacional no cuenta con ese servicio.

La pandemia ha exacerbado las brechas de acceso de los estudiantes venezolanos para acceder a la red, considerando implicaciones socioeconómicas como el costo de adquisición de un dispositivo móvil o portátil, inversiones en sistemas de conexión a internet, y brechas de uso y manejo de tecnología en las zonas más vulnerables.

En resumidas cuentas, la calidad académica y el cumplimiento de los objetivos formativos planteados se encuentran en entredicho, en detrimento del derecho a la educación de centenas de miles de niños y jóvenes de la región, ante un plan coyuntural que no cuenta con la debida preparación e infraestructura.

Explotación del carbón  

Otra de las situaciones documentadas en el boletín de Codhez, se refiere a los hechos que violan los derechos ambientales. La región zuliana ha sido víctima de la explotación petrolera y minera, dejando profundas consecuencias en su ambiente y ecosistema, a pesar de la vigencia de una abultada normativa de protección ambiental y la existencia de instituciones públicas competentes para su aplicación.

En relación con los derrames de petróleo, destaca el ocurrido el 18 de septiembre en el municipio Cabimas. Vecinos de la parroquia Jorge Hernández denunciaron que esta fuga llegó hasta las aceras y viviendas. Estos derrames de crudo se han venido incrementado desde 2018, llegando hasta zonas residenciales y orillas del Lago, sin ningún tipo de control o estudio que mida el impacto del daño ocasionado.

Con profunda preocupación, organizaciones ambientales locales también han denunciado la explotación del carbón en zonas rurales reconocidas como hábitats indígenas, que, desde el punto de vista constitucional, encuentran protección especial.

 En un hecho concreto, se denunció la supuesta explotación de carbón en el municipio Mara que podría afectar los tres ríos más importantes de la zona, los cuales surten el embalse que se encarga de la distribución del agua a 75% de la región.

 La contaminación del agua como consecuencia de la explotación del carbón, mantiene en alerta a los movimientos ecologistas como Pro Aguas del Zulia, que en febrero publicó un comunicado expresando la crítica y grave situación por la explotación del carbón en el Zulia, manifestando que “la contaminación por la explotación del carbón y su relación con las aguas, desde el punto de vista humano, desencadenaría un brote de enfermedades, tales como asma, asfixia, neumonía, bronquitis, tos, hongos, manchas y brotes en la piel, neumoconiosis, silicosis, silicoantrocosis, entre otros”.

 Otro de los hechos apuntados en el boletín, se refiere a las deficiencias del servicio de aseo urbano que son muy evidentes en los municipios de la región. En sectores de Maracaibo y Cabimas es común la incineración de basura. La razón es la discontinua recolección de basura por parte de las alcaldías.

Consideraciones finales

En este boletín, Codhez advierte que el deterioro de la educación en la región se agudiza. Lo más preocupante es el incremento de la deserción estudiantil y docente. Con respecto al salario que perciben los docentes, para la organización no gubernamental representa un total absurdo alejado de toda realidad. Se trata de personas con formación académica que no reciben un salario digno ni justo y que representan un invaluable recurso humano que no es fácil de sustituir.

Codhez manifiesta que “el derecho a la educación atiende a varios parámetros que van desde la formación curricular hasta la formación en valores y civismo, y para ello es imprescindible contar con calidad educativa, infraestructura, tecnología y personal capacitado, que esté a la par de los avances de los conocimientos científicos y del paradigma del respeto y protección de los derechos humanos, reconociendo al ser humano desde su dignidad como persona”. Para la organización, muchos de estos elementos están ausentes en las aulas de clases, de todos los niveles, del estado Zulia, por lo que se evidencia un incumplimiento por parte del Estado venezolano de una de sus obligaciones básicas para el crecimiento de la persona en una sociedad democrática y fiel defensora de sus derechos, como es la garantía del derecho a la educación.

En este boletín, Codhez exhorta al Estado venezolano a garantizar el derecho a la educación. En la situación actual y con la vigencia de un plan de educación a distancia, todos y todas deben tener las mismas oportunidades y las mismas opciones. Para ello es fundamental la reactivación y correcta prestación de los servicios públicos que permitan a niños, adolescentes y jóvenes continuar su formación académica.

También, se apunta que el ambiente no es un tema prioritario para las entidades de gobierno considerando las condiciones y hechos actuales. El Zulia también espera respuesta gubernamental para la conservación de su ambiente. El saneamiento del Lago de Maracaibo, el respeto a los ecosistemas como las serranías y las aguas, la recolección de desechos sólidos, la supervisión de las actividades petroleras y de minería son algunos de los muchos pasos que de manera integral deben darse para ello.

Consulta el Boletín Septiembre 2020 sobre la Situación General de los Derechos Humanos en el Zulia 

 Prensa Codhez
Fotografía: Betzabeth Bracho 

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