‘Los estereotipos de género y la violencia que sufrimos las mujeres es algo que debemos cambiar’

Desde que nacen, hombres y mujeres son educados de manera distinta, la sociedad determina las normas de género que influyen en el desarrollo de su personalidad y condicionan la manera en que ven la vida.

El valor de las niñas muchas veces es determinado por su rol reproductivo y su belleza. Los niños son criados para asumir un rol particular de masculinidad. En estos casos, el desarrollo en la niñez es limitado por los estereotipos de género.

Esta situación tan presente y constante en el mundo actual fue una de las razones para que Estefanía Reyes decidiera dedicarse al activismo feminista.

‘Somos víctimas del sexismo desde nuestra niñez. Darnos cuenta de esa realidad nos abre esa visión de género que nos hace ver el mundo desde una manera más crítica, entendiendo que los estereotipos de género y la violencia que sufrimos las mujeres es algo que debemos cambiar’. 

En una sociedad tan condicionada por los estereotipos de género como la zuliana, Estefanía buscó soluciones. 

Junto a Yiniba Castillo, Candy Ferrer, Madelein Rossel, Paola Albornoz y Samantha Valbuena, forma parte de Proyecto Mujeres, organización no gubernamental que promueve el activismo feminista desde 2015 y donde funge como coordinadora general. 

‘Como mujeres, las desigualdades y las discriminaciones que vivimos cotidianamente, así como la violencia, son invisibilizadas y a su vez muy normalizadas en nuestra sociedad. Por esa preocupación fue que nació nuestra organización’, destaca la comunicadora social y politóloga. 

La organización se dedica a diversas áreas del activismo feminista: el área de los derechos reproductivos sexuales y reproductivos, la denuncia de las formas de violencia de género y el activismo menstrual, que busca empoderar a las niñas para que puedan encontrar métodos alternativos de higiene menstrual. 

Activismo de hacer 

Cada espacio para hablar sobre los derechos de la mujer es una conquista, y desde Proyecto Mujeres han buscado llegar a más niñas y mujeres a través de distintos frentes: redes sociales, murales artísticos, cortometrajes y talleres en escuelas.

En 2015 idearon una campaña mediática en redes sociales y medios de comunicación denominada ‘¿Dónde está la píldora?’, una campaña de denuncia que sirvió para poner en la palestra el problema de la escasez de anticonceptivos en nuestra región.

Seguidamente, lanzaron la campaña ‘No Son Piropos’, conocida por estar presente en murales artísticos de la ciudad de Maracaibo. En las paredes de las avenidas más transitadas de la ciudad se reflejan ilustraciones muy llamativas que denuncian el acoso callejero y son, además, un reflejo de las situaciones cotidianas de acoso que viven las zulianas día a día.

Proyecto Mujeres encontró en los murales una forma muy llamativa de llevar su mensaje a los espacios públicos 

Recientemente, en el marco del Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer, volvieron a levantar sus brochas y pinceles.

‘Vivas nos queremos’ es el nombre del mural que ahora decora una de las paredes adyacentes a la avenida 5 de Julio de Maracaibo. Fue un trabajo conjunto realizado con organizaciones aliadas comprometidas con la defensa de los derechos de la mujer: Mulier Feminismo, Codhez y otras de la Red de Derechos Humanos del estado Zulia.

Los murales de Proyecto Mujeres se han vuelto una denuncia perenne, física y visible, para que todos tomen en cuenta que la violencia de género es real y cotidiana.

‘Hemos encontrado en los murales artísticos una forma muy llamativa de llevar nuestro mensaje a espacios públicos’, comparte la activista con satisfacción, pues sabe que se están sembrando las semillas para que la sociedad reconozca y asuma este problema. 

Este año se han enfocado también en crear su nuevo proyecto piloto ‘Niñas visibles’, que busca recoger datos sobre la situación de las niñas y su higiene menstrual en Maracaibo. Un tema que no recibe la atención que merece, por ser considerado incómodo y en algunas ocasiones vergonzoso.

El activismo de Estefanía, así como el de todas las organizaciones que luchan por la defensa de los derechos de la mujer, es el activismo por excelencia que rompe estereotipos. Un activismo valiente y que va de frente. Ella y su equipo siguen comprometidos en llevar el mensaje a más y más personas: ‘Ni Una Menos, Vivas Nos Queremos, Yo También’.

Que la voz de las niñas y jóvenes sean suyas y de nadie más. 

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Prensa Codhez