Un kilo de carne de primera cuesta casi 10 millones de bolívares en Barquisimeto
El poder adquisitivo en Barquisimeto, estado Lara, disminuye diariamente frente a la realidad de la hiperinflación del país y el salario mensual (fijado en Bs. 400.000,00 desde mayo de 2020), condiciones que forman parte de la emergencia humanitaria que agudiza cada vez más los niveles de inseguridad alimentaria en la población venezolana.
Así lo comprobó la Comisión para los Derechos Humanos del Estado Zulia (Codhez) en su monitoreo de oferta y precios de alimentos en el municipio Iribarren, correspondiente a la segunda quincena de enero de 2021. Este estudio —realizado entre el 27 y 29 de enero— forma parte de un estudio más amplio sobre la seguridad alimentaria en el occidente venezolano, que se efectúa desde el 2020.
En este sentido, la canasta Barquisimeto (CBQT), que comprende el conjunto de 21 alimentos de la dieta básica de los barquisimetanos, se cifró en Bs. 87.302.791,55 (USD 48,22), a una tasa de Bs/USD 1.810.619,20, equivalentes a 21.825,70% del salario mínimo mensual. En términos generales, en solo quince días, la CBQT aumentó +21,77% en bolívares, y +2,31% en USD.
Este monto marca una diferencia promedio global de +1.811%, en comparación con los precios acordados por el gobierno nacional para los cortes de carne de res de primera, de segunda y costillas; pollo entero; caraotas, arvejas, lentejas y frijoles; cartón de treinta huevos, queso blanco semiduro, harina precocida de maíz, pasta, arroz blanco de mesa, margarina, y aceite vegetal.
La carne cada vez más distante de los hogares larenses
El corte de primera de la carne de res continúa siendo el alimento más costoso de la CBQT. Al cierre de enero, su precio se ubicó en Bs. 9.039.895,40 por kilogramo, lo cual refleja un aumento de +31,12% respecto de la quincena pasada.
Por otra parte, el rubro monitoreado que registró mayor incremento en su costo fueron los frijoles, con un precio Bs. 2.694.950,00, es decir, +34,00% más alto que en la quincena anterior. A su vez, las arvejas tuvieron un aumento de +32,94%.
Además, se destaca la persistencia en la escasez de la venta de huevo por unidad en los establecimientos monitoreados.
Codhez reitera que la seguridad alimentaria es responsabilidad del Estado venezolano, que está obligado, de acuerdo con normas nacionales e internacionales, a implementar estrategias que promuevan las condiciones que garanticen la disponibilidad, el acceso y la adecuación de los alimentos a la población venezolana.
Además, la organización de derechos humanos se suma al llamado del Secretario General de Naciones Unidas a garantizar la acción humanitaria y la protección de los trabajadores humanitarios en el país, quienes a través de sus programas de asistencia alimentaria contribuyen a aliviar las carencias de las poblaciones más vulnerables en este escenario de emergencia humanitaria compleja, agudizado por la emergencia sanitaria de la COVID-19.
